Miércoles, octubre 20, 2010 Comentar
Jeffrey Scott Buckley, California 1966, era uno de esos. Hijo del músico de culto Tim Buckley, muerto en 1975, llevó mal durante toda su vida no haber tenido contacto con él. Sólo hablaron en una ocasión siendo aun niño. Se graduó en el Musician’s Institute de Los Angeles, pero siempre echó pestes de aquel período de aprendizaje académico. Él pensaba que como mejor se aprendía era tocando, arriesgando, incluso equivocándose frente al público. Su relación con la industria fue difícil y le llevó a un aislamiento casi total durante varios años, en los que emprendió una gira por pequeños locales de todo el mundo para mantener su independencia.
Su primer disco, Grace, fue valorado por la crítica y ensalzado por colegas como Dylan, MacCartney, Costello o Bono entre otros. Cuando forzado por la necesidad se disponía a grabar su segundo disco para la gran industria, murió ahogado en Memphis, en 1997, con tan sólo treinta años. Se especuló con el suicidio y con una posible enfermedad mental, pero eso sólo lo sabe el lado oscuro del espejo que se ahogó con él. Lo que sí se sabe es que se nos fue para siempre un artista de los que llegan, con magnetismo, con una voz técnicamente perfecta y un estilo que ha dejado huella. Escucha su interpretación del Hallelujah de Leonard Cohen y ten cuidado que engancha.
Por Comboi
+ Info
Jeff Buckley